Perfil de Egresado

Se concibe al profesional de la educación como un  sujeto crítico y reflexivo, que integra teoría y práctica desde propuestas de estrategias didácticas creativas y efectivas; generadoras de pensamiento autónomo que le permite actitudes de permanente actualización. Este profesional otorga centralidad a la enseñanza para promover la transmisión de conocimientos. La enseñanza, entonces se convierte en el deber ser de la profesión docente.

En este sentido el egresado del Profesorado en Educación Secundaria en Historia, poseerá las siguientes capacidades:

 

Implementar prácticas educativas en las cuales manifieste capacidad de:

  • Desempeñarse profesionalmente en contextos escolares diversos de las distintas orientaciones y modalidades de la Educación Secundaria.
  • Enseñar y actualizar activamente su propio marco de referencia teórico.
  • Favorecer el desarrollo de las capacidades de comunicación y expresión de los sujetos, a través de diferentes lenguajes verbales y no verbales.
  • Generar ambientes y espacios de trabajo que resulten estimulantes para el alumnado.
  • Facilitar los aprendizajes a través de estrategias didácticas que apunten a resolver problemas significativos y relevantes para el contexto social y cultural particular de los sujetos.
  • Acompañar el avance en el aprendizaje del alumnado, identificando tanto los factores que lo potencian como los obstáculos que constituyen dificultades para el aprender.
  • Programar y realizar evaluaciones diagnósticas, integradoras, continuas y sistemáticas, atendiendo a la diversidad de sujetos, situaciones y contextos.
  • Seleccionar y utilizar nuevas tecnologías de manera contextualizada, como una alternativa válida para la apropiación de saberes actualizados, potenciadoras de la enseñanza y de la participación activa de los estudiantes en su propio proceso de aprendizaje.
  • Comprender la responsabilidad que implica el uso social y didáctico de las nuevas tecnologías en tanto medio posible para la inclusión social.

 

Construir dinámicamente una identidad como profesional docente que le permita:

  • Desarrollar capacidades para la comprensión de fenómenos históricos sociales.
  • Promover el aprendizaje y el desarrollo cognitivo, social y afectivo de los estudiantes.
  • Diseñar e implementar prácticas educativas pertinentes y acordes con la heterogeneidad de los sujetos y sus contextos, siendo capaz de desempeñar sus tareas en realidades diversas (espacios urbanos, suburbanos o rurales).
  • Trabajar en equipo con otros docentes, elaborar proyectos institucionales compartidos, participando y promoviendo actividades propias de las instituciones de Educación Secundaria como así también con las organizaciones de la comunidad.

 

Asumirse como un ser autónomo y colectivo, comprometido con la realidad sociocultural en la cual está inserto, que pueda:

  • Reflexionar sobre su trayectoria escolar y profesional.
  • Aceptar sus limitaciones y optimizar sus posibilidades.
  • Concebirse como un sujeto en proceso de construcción dinámica.
  • Establecer vínculos basados en el respeto y valorización recíprocos.